Universidad Humanitas | Cálida armonía

Stuen Arquitectos

Imágenes: Jorge Silva

Humanitas es una Universidad para profesionistas localizada en el Nivel 1 dentro del Edificio O, sobre una de las principales avenidas de Guadalajara, Jalisco, la Avenida Vallarta. Cuando el cliente solicitó el proyecto, Stuen Arquitectos se dio a la tarea de investigar los principales elementos que buscan destacar en cada una de sus sedes, sobresaliendo así sus espacios abiertos y convivencia con la naturaleza.

El reto del proyecto fue generar estas mismas sensaciones pero en un nuevo espacio con una planta cerrada de 1,000 m2 y una terraza de 300 m2 en un primer nivel. Así todo el proyecto mantiene un juego entre la madera y los colores oscuros según el espacio en el que se encuentre, para dar un toque cálido y amortiguar la sensación de una escuela de negocios fría.

El piso es gris mate liso, por lo que no compite con el mobiliario, la vegetación, los detalles de madera en techo o los muros de recinto negro. Este detalle se intercambia al entrar a las aulas, donde el piso es tipo madera en petatillo para resaltar los asientos oscuros y el techo negro con lámparas led que parecieran estar flotando.

Se decidió no meter muros solidos visuales brindando así una gran cantidad de luz al interior de todo el nivel, generando la sensación de mayor amplitud en pasillos y aulas. Gracias a estos elementos la obra se siente ligera y abierta, lo que se refleja en un ambiente más relajado entre los usuarios, convirtiendo este elemento en el más acertado del proyecto.

De igual manera se optó por la selección de luminarias y contraste de colores oscuros en la bóveda para generar la sensación de que flotan. Con la fortuna de tener árboles de bastante altura en el exterior, con copas que se pueden observar desde el nivel de la universidad, se aprovechó el entorno para invitarlos a ser parte del proyecto.

La recepción pareciera estar bajo un cubo de madera con muros de recinto negro y un espejo de agua que mantiene el sonido del agua corriendo, un elemento sumamente relajante al momento de estudiar entre clases en los pasillos. A través de fotos colocadas a manera de galería en uno de los pasillos que dan a un mueble decorativo lleno de objetos, se genera un espacio más hogareño justo detrás de varias aulas, donde el lenguaje es muy simple para no distraer pero que al salir de clase relaja inmediatamente el ambiente.

Las mesas de parota junto con las macetas de barro en los pasillos ayudan igualmente a amortiguar el toque frío y metódico de escuela nocturna, aportando sensaciones más cálidas que estilizan el espacio de manera natural. Al aprovechar también los espacios que tienen acceso a este nivel hacia las terrazas, se abraza aún más este concepto de amplitud, exteriorizando los elementos internos con mucha vegetación y un pergolado de madera que hace mímica con la parte interior.